MEDIDAS CHIMENEA U HOGAR (PARTE I)

Hola amigos.
Con el siguiente artículo os hablaré de las chimeneas u hogares, y os proporcionaré las medidas de mi chimenea u hogar. Pues que mejor que tener una chimenea en la casa de campo donde tenemos nuestro huerto, y en épocas de frío, calentarse mientras disfruta uno de una buena lumbre. Es más entretenido que la televisión.

Cuando hice la obra de mi chimenea, busqué en la red todo lo que pude para llegar a tener una buena chimenea. Por buena entiendo que proporciona calor a la estancia, consume poca leña, y muy importante, no “hace” humo. Con lo de hacer humo me refiero a que todos los gases que se desprenden de la combustión salen debidamente al exterior a través del tiro, y no se expanden por la sala donde se encuentra la chimenea.
Como os digo, busqué en Internet todo lo que pude, y encontré cosas muy interesantes y que me fueron útiles. Por eso escribo este artículo. Para tratar de reunir lo mejor de todo ello.

En otro artículo podréis ver los croquis de mi chimenea con las correspondientes medidas, pero lo que quiero destacar no son las medidas ni las proporciones, pues aunque deben ser importantes, yo no pude respetar las indicaciones que tenía debido a las condiciones específicas de espacio y materiales, principalmente, y a pesar de ello, el resultado ha sido excelente.

Chimenea de rincón

  Mi chimenea ocupa un rincón del salón, y es una chimenea tipo “francesa” debido a que es su parte posterior hay un saliente que expulsa mayor cantidad de calor a la estancia y ayuda a la evacuación de los gases. Para mí, este es el punto clave, pues las dimensiones, como digo, han dependido de espacio disponible y materiales a utilizar.

Chimenea francesa

El problema que yo detecté, fue que si ese saliente lo hacía de obra (con ladrillos), me sería imposible desatascar la chimenea en un momento dado o limpiarla adecuadamente. Por ello lo que hice fue colocar una chapa de hierro que tapara el hueco. La colocación de esta chapa se hizo sobre unos tacos de acero de tal forma que entre el frontal de la chimenea y la chapa, quedara un hueco de unos 10 a 12 cm. Por ese hueco debía salir todo el humo.

Chimenea: detalle hueco salida humos

Al principio era reacio a creer que por tan pequeño espacio se pudiera desalojar todo el humo, pero cuando leí la explicación me convenció. Se debe a un efecto de aspiración que se produce porque por el tiro de la chimenea baja aire frío (que pesa mucho), y éste empuja al humo y le ayuda a ascender una vez que este aire frío se calienta en la parte posterior de la chapa (ya pesa menos y sube rápidamente). Con el gráfico siguiente lo trato de explicar y será más fácil entenderlo, pero si quieres comprobar como funciona la chimenea, pincha el enlace a este vídeo Funcionamiento chimenea.

Chimenea francesa: esquema circulación gases

Creo que la explicación de porqué funciona tan bien mi chimenea es debido al empleo de este sistema. Además, al utilizar la plancha de hierro, aunque es muy pesada, me permite hacer la limpieza del tiro de la chimenea y del hollín acumulado sobre la misma chapa. Y por otro lado, en caso de que esté quemando algún tipo de leña que produce mucho humo por estar verde, se puede regular fácilmente para abrir un mayor hueco que permita la salida de ese exceso de humo.
Otro aspecto importante que hay que tener en cuenta, es que la salida de humo en el exterior, el tiro de la chimenea, debe superar el punto más alto de alrededor (normalmente la cumbrera) todo lo que se pueda. Te hablan de que al menos 1 metro, pero en mi caso no llegará a los 50 cm y, como os digo, no va mal.

Chimenea: salida exterior

En otro artículo dejaré los croquis con las medidas de mi chimenea

Medidas de mi chimenea u hogar.

Si deseas ver como funciona mi chimenea pincha en el siguiente enlace: Chimenea ardiendo

Espero que os sea útil este artículo y os resulte interesante.

Os remito además a mi canal de Youtube donde podréis ver vídeos temas relacionados con el huerto, que espero sean de vuestro interés.

Un saludo y hasta otra ocasión.

EL CULTIVO DE ACELGAS

En el siguiente artículo veremos el cultivo de las acelgas de forma general.

Las acelgas pertenecen a la familia de las quenopodiáceas, la misma familia de espinacas y remolachas. Las espinacas tienen un aprovechamiento culinario similar a las acelgas, pero no así las remolachas, que principalmente se cultivan para aprovechar su parte subterránea, bien para su consumo directo, bien para obtención industrial de azúcar.

Las acelgas se adaptan bien a cualquier tipo de suelo y clima, pero en climas muy cálidos, en épocas de mucho calor, ralentiza su crecimiento.

Es recomendable realizar una labor que facilite su desarrollo radicular, que es muy amplio, y se caracteriza por tener raíces muy profundas. Además, conviene preparar muy bien la superficie si se va a realizar siembra, ya que las semillas son muy pequeñas. Si se realiza plantación, no es necesario que la preparación del terreno en su parte más superficial sea tan exigente.

Las semillas de las acelgas se acumulan en glomerulos, que contienen varias semillas. Esto es importante considerarlo pues si se hace siembra mediante glomerulos, será necesario realizar un entresaque de plantas.

Glomerulos de acelgas

Glomerulos de acelgas

La siembra puede realizarse en dos épocas. En otoño, para recolectar a finales de invierno y primavera, y a finales de invierno, para recolectar en verano y otoño. Si elegimos el otoño, el cultivo se subirá a flor en verano, finalizando su ciclo de cultivo.

Las labores de cultivo son reducidas, limitándose prácticamente a la eliminación de malas hierbas.

En cuanto a las plagas y enfermedades, hay que señalar la importancia de caracoles y babosas, y algún insecto minador de las hojas. Incluso en zonas más cálidas tienen cierta incidencia los saltamontes, que pueden dañar algunas hojas al alimentarse de ellas.

El aprovechamiento de las acelgas se centra en sus hojas, tanto de las hojas como de las pencas. Esta últimas son los peciolos de esas hojas, y aunque son más gruesas y duras, son un excelente alimento.
La recolección se hace hoja por hoja, cuando estas llegan a tener unos 15-20 cm, mejor si es a mano y sin usar cuchillo, ya que si hacemos cortes a la planta, podemos reducir las futuras producciones. Si dejamos crecer mucho las hojas, la planta deja de producir y, además, las hojas de mayor tamaño, adquieren una textura plástica que no es muy agradable desde el punto de vista culinario.

VÍDEO: EL CULTIVO DE LAS ACELGAS

Espero que os sea útil este artículo y os resulte interesante.

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Un saludo y hasta otra ocasión.

EL CULTIVO DE LOS AJOS

Hola amigos.
Con el siguiente artículo os hablaré, de una forma resumida y general sobre el cultivo de los ajos.

Cabeza y dientes de ajos

El nombre científico de los ajos es Allium sativum, y esta especie pertenece a la familia de las liliáceas, la misma familia a la que pertenecen cebollas y espárragos.

El ajo es un bulbo, que a su vez está formado por bulbillos, normalmente su número oscila entre 8 y 10 por bulbo. El bulbo se correspondería con la “cabeza” de ajo, y los bulbillos, con los “dientes” de ajo.

Dientes de ajos

El ajo es una planta bastante rústica, adaptándose bien a todo tipo de suelos y climas, pero prefiere suelos francos, con riqueza en materia orgánica y nutrientes, y climas templados. Lo que si que no tolera son los suelos encharcados, ya que se puede ver afectado fácilmente por podredumbres y asfixia radicular que se derivan de esos encharcamientos.

En la preparación del terreno es recomendable realizar una labor profunda para permitir un mejor desarrollo del bulbo, y un posterior refino de la superficie para mejorar la nascencia. También conviene retirar las piedras de mayor tamaño que pueden producir deformaciones de la cabeza. Si decidimos aportar estiércol para incrementar la cantidad de materia orgánica, es recomendable realizar dichos aportes con antelación al cultivo, ya que el ajo puede tomar los olores y sabores del estiércol, con lo que se trasladarían a nuestros platos.

En el cultivo del ajo, lo normal es efectuar la plantación, no la siembra. Se realiza la plantación mediante la introducción en el suelo de los dientes que forman la cabeza, y siempre asegurándose de que el “pico” se sitúa en la parte superior, y la parte más “dura”, en la parte inferior, pues del “pico” saldrá la parte aérea, y de la parte más “dura”, las raíces.

Las fechas más frecuentes de plantación van desde noviembre a enero. Se coloca el diente a una profundidad de unos 4 cm, y estableciendo distancias entre líneas de 50  cm, y distancias entre plantas de 15 cm.

Las labores que se suelen realizar al cultivo se reducen a la eliminación de malas hierbas, y al aporte de algún riego de apoyo, siempre que se cultive en secano y que la primavera venga muy seca. Conviene no regar 1 mes antes de la recolección para facilitar el arranque de la cosecha y su posterior conservación. La recolección se realiza en los meses de mayo o junio, (en función de la fecha de plantación).

Para evitar daños en el cultivo es conveniente prestar mucha atención a la tarea de romper la cabeza para separar los dientes que se usarán en la plantación, evitando en todo momento causar daños a dichos dientes, que podrían facilitar la entrada de patógenos. Si nuestro huerto es propenso al encharcamiento, sería recomendable elevar la altura de los surcos o realizar el cultivo en caballones, reduciendo los problemas debidos al exceso de agua.

Vídeo: El cultivo de los ajos

Espero que os sea útil este artículo y os resulte interesante.
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Un saludo y hasta otra ocasión.